Porque ni el mejor equipo del mundo actualmente, ni seguramente el mejor de la historia, el FC Barcelona, ha podido ganarnos cuando la casta y el coraje ha estado presente en los corazones y las botas de los jugadores del Sevilla FC.

Llegaba el Barcelona con números que asustaban a propios y extraños: 20 partidos fuera de casa sin perder, la mayoría con victorias, marcando goles como churros, sin encajar apenas goles...

En fin, a lo que nos tiene acostumbrados la maravilla hecha fútbol que es el conjunto de Pep Guardiola.

Gregorio Manzano se presentaba al choque con un cambio de sistema donde prescindíamos de un delantero para fortalecer el centro del campo con Zokora, hecho que nos aportaría más músculo y ayuda. Además, el otro cambio significativo era el cambio de bandas de Navas y Capel.

Hay cosas que jamás lograré entender del fútbol, y ésta es una de ellas. ¿Por qué dos jugadores puros de bandas cuya función principal es alcanzar la línea de fondo y centrar al área tienen que ser "sacrificados" a jugar el la banda opuesta?

La explicación de este hecho es que por la banda derecha azulgrana juega un tal Daniel Alves, y Navas era más adecuado para defender a éste futbolista.

Pues esto me parece aún más grave.

Si por algo se caracterizaba el "Sevilla de los títulos" era por no fijarse en quien tenía delante y hacer lo que sabía, fuese cual fuese el rival. Como ya estamos viendo, las cosas han cambiado.

Pero bueno, si esto Gregorio Manzano lo había ensayado (que esa es otra) perfecto por defender su idea del partido.

Antes de empezar el choque, Luis Fabiano salió al campo para despedirse de la afición, afición que dio una sonora ovación al mejor delantero centro de la historia del Sevilla FC.

¡Gracias por todo Luisfa!

La primera parte fue como suelen ser los últimos envites contra el Barcelona: salimos derrotados, sin ganas, entregando la cuchara... el calificativo que queramos ponerle está bien puesto. El Barça campaba a sus anchas, sin recibir presión, tocando y tocando en las inmediaciones del área, intentando pases al hueco...

Era la crónica de una muerte anunciada. Muerte que llegó a la media hora cuando Iniesta, en uno de esos pases en profundidad, deja solo a Alves delante de Javi Varas para que Bojan, tras pase del brasileño, acompañase al balón al fondo de la portería.

La cosas se ponía peor que imposible viendo lo que todos estábamos viendo.

Descanso en el Pizjuán y muchos tenían en mente abandonar.

Algo tuvo que pasar en el vestuario (en tono positivo) que el equipo salió con una mentalidad totalmente distinta hasta el final de los primeros 45 ofrecida.

La casta y el coraje habían llegado para rescatarnos.

Gregorio Manzano se dejó de sistemas novedosos y puso al "Cid" del Sevilla, Frederic Kanouté, sobre el campo.

La segunda parte comenzó con una gran jugada entre Medel, Rakitic y Kanouté, quien deja solo a Negredo delante de Valdés. Álvaro se escora y cuando parece que la jugaba se va a perder, se saca un centro al área pequeña para que Navas remate de cabeza al fondo de las mallas.

¡1-1! El milagro era posible.

Espectáculo del bueno en la segunda parte.

La posesión era del Barcelona, las ocasiones más claras eran para nosotros. El propio Jesús Navas marró una clarísima delante de Victor Valdés. Kanouté no acertó a golpear bien otro centro de Perotti. Valdés sacó otra clara del maliense...

Ellos también tenían las suyas, sobre todo el impresionante tiro de Iniesta al larguero (¡qué maravilla que éste megacrack sea español!) o las dos que tuvo que sacar Medel cuando el balón iba para dentro.

El encuentro terminó y, como me pasó a mí, a muchos nos salió un "¡Se nos han escapado vivos!". Pero estamos felices y satisfechos porque nuestros gladiadores se dejaron el alma en la segunda parte.

Nombres propios:

Álvaro Negredo. Lo del vallecano esta temporada es para admirarlo. Es brutal la temporada que se está marcando el bueno de Negredo. Curra igual que siempre, sólo que ahora le luce más. Se parte la cara (nunca mejor dicho) por el equipo, y lo más importante, el equipo se da cuenta de esto y se apoya en él siempre.

Medel: Otro post más donde me veo en la obligación de mencionar su actuación. Podemos decir, sin temor a equivocarnos, que el chileno va a marcar una época en el Sevilla FC. Es todo corazón, derroche de fuerza y calidad, con y sin balón. Al Barcelona le fue imposible entrar por donde él estaba. Xavi e Iniesta no sabían que hacer.

Gary, ¡qué bueno que viniste!

También quiero destacar a Fazio, Navas y Fernando Navarro. Fueron, para mí, los mejores del partido por parte sevillista.

Pienso que debemos quedarnos con lo que vimos en la segunda parte, pues podemos darnos cuenta de que, haciendo las cosas así, todo nos va a ir mucho mejor.

Ahora toca Valencia, un equipo que no levanta cabeza desde que fue eliminado de la Liga de Campeones. Esperemos que nuestro Sevilla siga creciendo.

Sevilla, que la casta y el coraje nunca te abandone.