Ya no voy a hacer la crónica a la que acostumbro después de cada partido, pero sí quiero redactar algunas de las cosas, tanto buenas como malas, con las que me quedé del choque.

Empezaré por lo bueno.

Primero, las últimas alineaciones puestas en liza por Gregorio Manzano me gustan, no por el hecho de los jugadores que pone en el once, que también, sino porque, después de mucho tiempo, el sevillismo ya se la sabe de memoria. Y eso es algo muy importante.

También me quedo con el "debate de la portería". Tras la recuperación de Palop (hoy no ha realizado el entrenamiento completo con los compañeros, miedo me da), los "informadores" decían que el mejor portero de la historia del Sevilla volvería a su puesto. Pero Manzano no lo ha querido así, y Javi Varas está respondiendo a base de partidazos. Y lo más importante de todo, Palop, en una muestra más del gran señor que es, no ha alzado la voz (ni lo hará, estoy convencido) y ha entendido que ahora es él el que tiene que ganarse su sitio bajos los palos.

Otro detalle significativo, el papel de Fazio. Si las lesiones les respeta y sigue teniendo la confianza de todos, tenemos central para rato, o para años, como lo queráis. Que era un pedazo de futbolista se sabía y se le veía, pero creo que a todos nos comían las dudas por el calvario de contratiempos en forma de lesiones que el argentino ha sufrido en las últimas temporadas.

¡Qué grande Fazio! (nunca mejor dicho). A Llorente se lo comió, no se supo de él durante todo el partido.

Y lo último que quería destacar, en lo positivo, es la vuelta definitiva de las bandas que, aunque no fueron tan protagonistas como en otras ocasiones, se les nota que vuelven a estar enchufados.

Gran noticia para un equipo cuya seña de identidad siempre han sido eso, las bandas.

Entre las cosas negativas que me deja el partido, a parte del resultado, claro está, no termino de entender el por qué de que el Sevilla de Manzano se empeñe, partido tras partido, en tirar a la basura una parte de los encuentros (en el caso del domingo fue la primera parte). No lo entiendo.

Segundo, cómo no, las lesiones de Negredo y Luis Fabiano.

Negredo ha dicho hoy que está perfecto y que el entrenador puede contar con él para jugar contra en FC Barcelona, "sólo" han sido unos puntos. Y lo de Luis Fabiano sí que ha sido más serio aunque hemos tenido mucha suerte, pues ésta parece haber sido la jornada de las lesiones de rodilla (Gavilán 6 meses de baja por rotura del ligamento cruzado, y Tote, con triada, 8 meses). Por suerte, lo de LF10 se queda en seis semanas.

Y lo más importante para mí que quizás nadie haya percibido durante el partido: la cantidad de situaciones favorables, en forma de balón parado, le concedimos al Bilbao.

El Athletic se caracteriza por ser un equipo que basa su juego en colgar balones a Llorente, y a Javi Martínez en caso de faltas o córners. Bueno, pues, así por lo alto, conté unas siete faltas propicias para un centro al área y seis córners sólo en la primera parte. Brutal.

Afortunadamente, no materializaron ninguna de ellas.

No podemos conceder situaciones de ventaja para el rival, teniendo en cuenta que somos un coladero en lo que a sistema defensivo se refiere.

No se puede defender peor que como lo hacemos nosotros.

Preocupante ante la "pandilla" de chiquillos que viene el domingo...

... un tal FC Barcelona, el mejor equipo de la historia del fútbol.